Los invito a leer este artículo escrito por el Correligionario y Amigo Gerardo Bonino. Agradezco su colaboración que hace de este blog, lo que en principio nos planteamos, un lugar de expresión e intercambio de ideas. Gracias. Mauro Pildain.
¿BENEFICIARIOS O COMPLICES? Por Gerardo Bonino
La Presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el día de ayer la creación de un fondo federal solidario, a efectos de “coparticipar” el 30% de lo recaudado por el Estado Nacional en concepto de retenciones a la soja, a las provincias y que estas lo repliquen a su vez con los municipios de su jurisdicción.
El denominado conflicto con el campo, luego del dictado de la resolución 125, que tuviera como pico de tensión aquel voto “no positivo” del Vice-Presidente Julio Cobos, ha vuelto a ser el centro de atención luego del anuncio presidencial.
El ex ministro Martín Lousteau y también la Presidenta, usaron como fundamento al dar a conocer y defender la resolución 125, la lucha contra la “sojización” de la Argentina. Ayer quedó refutado de plano dicho argumento. La improvisación es uno de los peores enemigos del “subconsciente” ya que los “frenos inhibitorios” de la dialéctica o discurso resultan más fácilmente eludibles y muestran al desnudo la realidad de las intenciones.
¿Qué gobernador o intendente no querrá mayores extensiones de soja a efectos de lograr mayor recaudación?
Se transformaron automáticamente, diría de manera sorpresiva, en los primeros interesados en la siembra del que podríamos denominar en adelante “yuyo federal solidario” (dos nuevas virtudes).
Los tributos tienen en algunas oportunidades la finalidad de desalentar algunas prácticas que el Estado (no el gobierno) considera incorrecta, abusiva o perjudicial. El Presidente norteamericano Obama, ha elaborado un proyecto que aplica una alícuota del 90% a los “bonus” que se paguen a los directivos de empresas que han recibido aportes del Estado, como contrapartida de las escandalosas pagas recibidas por los ejecutivos de AIG.
En la Argentina, la finalidad inicial (frenar la “sojización”) no se logrará cuando la base de los “beneficiarios” del tributo es más amplia que antes. Indirectamente, los gobernadores e intendentes se transformaron en cómplices del “mal” que nos fue anunciado hace ya más de un año.¿La medida reactivará la producción? No. Solo revela el déficit fiscal existente en las provincias y municipios e inyecta dinero líquido para enfrentar la futura y pareciera “pronta” campaña electoral, a la vez que coloca un salvavidas de plomo a los productores agropecuarios y a las agroindustrias, dos factores esenciales en la recuperación argentina y actores principales de nuestro futuro.
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